París: Día 3

7/11/2010 Beldz 0 Comments

En la mañana del tercer día teníamos programado hacer dos visitas: la primera, al cementerio de Père-Lachaise; la segunda, a la Ópera Garnier. Aunque puede parecer extraño incluir la visita a un cementerio, el Père-Lachaise es uno de los más visitados y más famosos de París. Muchas son las celebridades enterradas aquí: Honoré de Balzac, Dominique Ingres, Ferdinand de Lesseps, Amedeo Modigliani, Molière, Alfred de Musset, Edith Piaf, Camille Pissarro, Marcel Proust, Gioacchino Rossini, Georges Seurat, Gertrude Stein, Oscar Wilde, Guillaume Apollinaire, Vincenzo Bellini, Sarah Bernhardt, Gustave Caillebote, Champollion, Fréderic Chopin, Jean-Baptiste Corot, Honoré Daumier, Jacques Louis David, Eugène Delacroix, Paul Eluard o Théodore Géricault.

Entrada del Metro
Cementerio de Père-Lachaise

Cementerio de Père-Lachaise
Antoine Etex - Tumba de la familia Raspail

Cementerio de Père-Lachaise

La Ópera de París se inauguró en 1875 tras diversos contratiempos que retrasaron su apertura -como la Guerra Franco-Prusiana o la Comuna de París, principalmente-. Fue construida por el arquitecto Charles Garnier en estilo neobarroco. Es un edificio monumental, profusamente decorado - con estatuas clásicas, frisos, mármoles, columnas opulentas revestidas de oro, bustos de compositores famosos-. Sin duda, una de las visitas más bonitas y espectaculares del viaje.

Ópera Garnier - Fachada exterior
Ópera Garnier - Sala interior

Ópera Garnier - Escaleras del vestíbulo
Louvre

La tarde estaba reservada al museo del Louvre. El edificio se remonta al siglo XII, cuando el antiguo castillo se reconvirtió en palacio real. Desde entonces, se fue remodelando y mejorando hasta que se abrió por primera vez como museo en 1793. Las colecciones de la Corona, albergadas allí, pasaban a ser nacionalizadas y mostradas libremente al público. La famosa pirámide, desde la cual se accede ordenadamente al museo, fue obra del arquitecto chino Ieoh Ming Pei y se inauguró en 1989. El museo alberga una de las obras más célebres de la historia, "La Gioconda", de Leonardo da Vinci. Pueden verse, también, muchísimas pinturas famosas -así como esculturas, orfebrerías, diversas artes decorativas, etc.-, entre las que destaco las siguientes: